Al afrontar el Campeonato del Mundo MOTUL FIM Superbike 2017 con una nueva alineación de pilotos y una moto nueva, el equipo Red Bull Honda asumía que tenía un difícil reto por delante con la CBR1000RR Fireblade SP2. La escudería comenzó la temporada de manera esperanzadora, pero en mayo resultó golpeada por la tragedia cuando Nicky Hayden perdió la vida en un accidente mientras entrenaba en bicicleta. La desaparición del piloto estadounidense ensombreció al equipo dirigido por Ronald Ten Kate.

Stefan Bradl y Hayden habían iniciado la campaña con determinación y fuerza, a pesar del poco tiempo de ensayos que habían podido tener con la Fireblade. El piloto germano, que había llegado a WorldSBK procedente de MotoGP™, debutó en Australia sumando sus primeros puntos y siguió avanzando en la siguiente prueba, en Tailandia. En el TT Circuit Assen, Bradl firmó su mejor resultado de la temporada clasificándose en el top 6 de la Carrera 1 y desde ahí empezó a situar su montura en el top 10 de manera regular. El Campeón del Mundo de Moto2 de 2011 estaba dando pasos adelante con su moto, pero la lesión sufrida en Portugal lo apartó de la competición el resto de la temporada después de tener que someterse a una intervención quirúrgica.

Encarando su segunda temporada en el paddock de WorldSBK, Hayden tenía que competir ahora con una nueva Fireblade después de sumar cuatro podios y una victoria en 2016 con la anterior versión de ese modelo. El estadounidense aceptó el desafío y firmó su mejor resultado de 2017 en el Circuito Internacional de Chang, un top 7, y pudo obtener puntos de manera regular en las 10 carreras en las que compitió. Su trágico fallecimiento dejó un gran vacío en el paddock de WorldSBK y su figura se sigue echando de menos en un Campeonato que le había acogido como el ídolo internacional que era.

Su compatriota Jake Gagne fue llamado por el equipo para subirse a la moto de Hayden en el Mazda Raceway Laguna Seca y el joven piloto se defendió bien en su primera salida a la escena mundial. Anotó sus primeros puntos delante de la afición local y posteriormente fue requerido de nuevo por el equipo en los Rounds de Francia y Qatar, donde continuó aprendiendo con la Fireblade y obteniendo tres top 12.

Davide Giugliano reapareció en el paddock WorldSBK en Lausitzring y compitió posteriormente en Magny-Cours, Jerez y Qatar. El italiano, que se había trasladado al Reino Unido en 2017, se enfrentó al reto de la Honda durante la segunda mitad de la temporada y cosechó su mejor resultado en Francia con una 8ª posición.

El quinto piloto que cabalgó la bestia japonesa esta temporada fue Takumi Takahashi, convocado en las citas de Portimao y Jerez. El piloto japonés de HRC contó con el apoyo de los ingenieros de fábrica y pudo anotar puntos en tres de sus cuatro apariciones. Su mejor resultado fue un top 10 en Portugal, donde también aportó su granito de arena al equipo Red Bull en el desarrollo de la CBR.

Revive algunos de los momentos destacados del Red Bull Honda Team esta temporada con el VideoPass de WorldSBK.